Hablar en público es una de las habilidades más difíciles de desarrollar pues además de dominar la propia personalidad frente a un grupo de personas, es necesario tener un discurso lo suficientemente interesante para captar su atención y lo suficientemente claro para lograr transmitir nuestro mensaje.
La intención, el dinamismo, la asertividad, la pasión y el lenguaje corporal se convierten en factores fundamentales para comunicarnos con la audiencia, sin embargo, no siempre estamos preparados para desenvolvernos frente a un público que puede ser tan diverso como estrellas hay en el universo.
Para evitar fallas en tus presentaciones y lograr una comunicación efectiva, en Jobomas te decimos cuáles son los errores más frecuentes que cometen los profesionales al hablar en público. Toma nota.
#1. Desconocer el objetivo de tu discurso
El primer error es lanzarse al ruedo en blanco y sin idea de lo que queremos lograr con la presentación. No está mal improvisar en cuanto a las dinámicas o a la conversación, lo que está mal es no saber a qué punto queremos llegar con ella. Para que un discurso sea efectivo se deben conocer algunos puntos básicos como: 1) Los tópicos que queremos abordar 2) La reacción que buscamos en los oyentes 3) La estrategia para captar su atención 4) Los que queremos aportar al auditorio.
#2. No empatizar con el público
Los expertos coinciden en que tienes sólo diez minutos a partir del inicio de la presentación para 'conectar' con la audiencia o de otra forma, puedes estar seguro de que tu presentación será un fracaso. Las recomendaciones son: 1) ir al grano con el tema, es decir, hacer una introducción rápida, sin demoras, sin rodeos y de manera concreta. 2) plantea tu punto de vista y las razones del mismo pero asegúrate de hacerlo de manera asertiva y haciendo uso de la inteligencia emocional. 3) engancha con datos concretos; apóyate en cifras, estudios, cálculos, y detalles que puedan resultar particularmente interesantes y que logren atrapar su atención.
#3. Ignorar a tu audiencia
Si no pones atención a los oyentes y estableces conexión con ellos es muy probable que ellos también te ignoren. Por eso es necesario que promuevas la participación del público y estés atento a sus reacciones porque ello te ayudará a mantener su atención, crear un ambiente de interacción y a crear lazos de confianza para la retroalimentación.
#4. El diseño cuenta
Bien dicen que la 'forma es fondo' de manera que no podemos confiar únicamente en el discurso y dejar de lado las herramientas de apoyo que podemos utilizar. Hay que tener claro el impacto que los seres humanos captamos entornos a través de todos nuestros sentidos y que éstos, nos provocan distintas emociones. Cuando te pares frente a un público, asegúrate de generar un ambiente audiovisual (diseño, color, sonido) que fortalezca tu discurso, que despierte la emoción de los oyentes y que facilite su comprensión. Por supuesto, el material de apoyo debe estar en sintonía con tu desempeño.
#5. Más allá de las palabras
Las palabras comunican, pero también lo hacen el cuerpo y el tono de voz. Cada movimiento corporal debe estar conectado a lo que quiere expresarse y ésto debe hacerse en la velocidad y el volumen correctos. Hablar demasiado rápido o demasiado bajo sin duda hará que pierdas a tu audiencia de la misma forma que lo harán los gestos torpes o las actitudes nerviosas. La clave es mantener un lenguaje corporal que transmita control, un volumen alto para resaltar puntos específicos del discurso y una velocidad de moderadamente más lenta cuando se requiera captar la atención.
#6. Adiós arrogancia
Cuando estés frente al público recuerda que el tema principal no eres tú, ni tu vasta experiencia, ni tus grandes conocimientos. Puedes comentar algunas anécdotas y citar ejemplos externos pero, si haces que la ponencia se centre únicamente en ti o por el contrario, sobrecargas a los oyentes con datos de otros autores (que supones deberían conocer) estarás en riesgo de fracasar. Si aspiras a tener éxito en una presentación es mejor que te olvides de parecer un sabelotodo y dejes a un lado la arrogancia; la mejor manera de salir victorioso es actuando de manera natural y demostrando interés por el público.
Como regla de oro cortesía de William J. Byram recuerda que "orador es aquel que dice lo que piensa y siente lo que dice".
En Jobomas queremos que encuentres el empleo de tus sueños y por eso te ofrecemos las mejores ofertas de empleo alrededor del mundo y cientos de opciones para potencializar tus habilidades a través de nuestros cursos de formación. En nuestro sitio también puedes contactar personalmente a las empresas más competitivas del mercado y hacerles saber de tus talentos. Tu trabajo ideal lo encuentras con nosotros.
Compartir
Entre la mayoría de los profesionales inmersos en el mundo laboral existe un terrible hábito que falsamente, se cree que...
seguir leyendoTodos los profesionales tenemos un espíritu emprendedor, sin embargo, no siempre contamos con la experiencia para desarrollar...
seguir leyendo